La proclamación oficial de Carlos III como nuevo rey del Reino Unido por parte del ceremonial Consejo de Ascensión, en sucesión de Isabel II tras su fallecimiento a los 96 años de edad el pasado jueves, ha tenido lugar a lo largo de la mañana del sábado en el palacio de Saint James. El evento ha sido sentenciado con un "Dios salve al rey".
Esta ha sido la primera vez en la historia en la que la sesión del Consejo ha sido televisada. "Dado que Dios todopoderoso se ha complacido en llamar a su misericordia a nuestra fallecida soberana, la reina Isabel II, de memoria sagrada y gloriosa, la corona de Reino Unido e Irlanda del Norte recae única y legítimamente en el príncipe Carlos", se ha podido escuchar en la proclamación.
Carlos III ha asegurado cumplir con sus tareas como monarca, en sus palabras, "durante el tiempo que Dios me mantenga con vida", y ha acordado una serie de órdenes para permitir la continuidad del Gobierno.
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